En el marco de la conmemoración del Día Mundial para la Prevención del Suicidio, la Organización Panamericana de la Salud (OPS/OMS) está abogando por un cambio significativo en la forma en que se aborda el tema del suicidio.
El director de la OPS, Jarbas Barbosa, insta a reemplazar las narrativas estigmatizantes que rodean al suicidio con el objetivo de promover una cultura de apoyo y comprensión. Este enfoque busca contrarrestar un problema grave de salud pública que afecta a numerosas comunidades en todo el mundo.
Bajo el lema «Cambiar la narrativa», se busca no solo desafiar las percepciones negativas asociadas con el suicidio, sino también alentar a individuos, comunidades, organizaciones y gobiernos a abrir diálogos francos y constructivos sobre este tema sensible.
El propósito es derribar las barreras del estigma que rodean al suicidio, fomentar la conciencia pública y crear un entorno propicio para discusiones abiertas sobre la conducta suicida. Esta iniciativa busca no solo prevenir el suicidio, sino también ofrecer un apoyo vital a aquellos que luchan con pensamientos suicidas y a sus seres queridos.
“Uno de los mayores obstáculos para la prevención del suicidio es el estigma asociado, que puede disuadir a las personas de buscar la atención necesaria. El suicidio a menudo se malinterpreta como un acto de debilidad, egoísmo o incluso como un delito”, afirmó.
Según la OPS, en las Américas, cerca de 100,000 personas mueren por suicidio cada año, y muchas más luchan contra pensamientos y comportamientos suicidas.