Por MARINO RAMIREZ GRULLON
Por suerte que no ha sido accidentada pero la campaña electoral que terminará en mayo próximo tiene una falta de vocación de poder para la oposición que se nota desde lejos.
Se ha estado alegando falta de recursos desde el litoral opositor, sin embargo 20 años de ejercicios de poder no puede haber dejado al Partido de la Liberación y a su desprendimiento Fuerza del Pueblo sin suficientes recursos para abordar una ruta de poder que parece definitoria.
Lo que pasa es que la clase partidaria nacional se ha adaptado a los recursos que por ley les proporciona la Junta Central Electoral del pago de impuestos de todos los dominicanos y sin eso no quieren hacer nada, aunque todos sabemos que muchos de esos recursos son llevados a Bancos comerciales y financieras a guardar el descanso eterno del ahorro para nóminas de pago por fidelidad.
Ya se desembolsaron miles de millones de pesos para las presidenciales y no logro ver esa vocación de poder mediante grandes marchas y caravanas para promocionar propuestas y promesas electorales.
No se puede alegar falta de dinero pero sí existe poca vocación de poder si es que se quiere ganar las elecciones presidenciales y congresionales de mayo.
Anduve por Santiago y otras provincias del Cibao central y no aprecié el pasado fin de semana nada extraordinario en propaganda política.
Aunque los candidatos ciertamente recorren el país pero es a pasos lentos y sin grandes multitudes las que cuenta dinero mover pareciendo que los partidos no están en eso, dejando a los candidatos hacer las cosas de manera individual a ver cual puede llegar a un puesto electivo sin grandes aspavientos.
Se ha orientado más bien la oposición a realizar denuncias de compra de personas, cédulas y otros movimientos que todos aplican depende en que lugar estén en el gusto o espectro electoral.
Afirmo que con denuncias no se ganan votos, hay que invertir, ya no se ganan elecciones sin recursos y si la estrategia es guardar dinero para los próximos cuatro años, la oposición no ganará.
En estos países tercermundistas el que está arriba es que fuerza la regla del juego y ahora está el Partido Revolucionario Moderno por tanto al ese es que hay que caerle atrás.
Por como van las cosas de éstas elecciones quedarán quizás dos grandes agrupaciones políticas a menos que en el conteo de votos no ayuden a otros , cosa que ha pasado anteriormente.
De lo contrario unos se reducirán al mínimo y otros podrían desaparecer si se aplica realmente la ley de conteo electoral.
Prefiero pensar que esta Junta Central Electoral va con la ley en las manos, por tanto sólo desear que a Dios que reparta suerte.